El Protocolo de Acoso Laboral es una medida de prevención y actuación que toda empresa en España debe implementar para garantizar un entorno de trabajo libre de hostigamiento.
Este documento tiene como objetivo establecer un marco de actuación frente a posibles casos de acoso en el ámbito laboral, protegiendo tanto a las víctimas como a la empresa de posibles sanciones.
Sí, desde el año 2020, la legislación española obliga a todas las empresas, sin importar su tamaño o sector, a disponer de un protocolo interno contra el acoso laboral.
Esta medida es parte de la normativa de prevención de riesgos laborales y tiene como base la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, así como el Real Decreto Ley 902/2020 sobre igualdad retributiva entre mujeres y hombres.
Las consecuencias de no tener un protocolo adecuado pueden ser devastadoras:
Multas significativas y acciones legales contra la empresa, especialmente si durante una inspección se detecta la ausencia del protocolo. Las multas varían en función de la gravedad de la infracción, desde los 7.501 euros por infracciones leves hasta los 125.018 euros en casos muy graves.
Pérdida de ayudas o beneficios a los que la empresa podría haber tenido acceso, así como la exclusión de programas de empleo por un período determinado.
No te arriesgues a enfrentar sanciones económicas ni demandas legales. Pide presupuesto sin compromiso y protege a tu empresa.
Crear un protocolo de acoso laboral puede parecer un proceso complejo, pero si sigues una serie de pasos bien estructurados, lograrás cumplir con la normativa de manera eficaz y mejorarás la cultura laboral de tu empresa.
Crear un protocolo de acoso laboral puede parecer un proceso complejo, pero si sigues una serie de pasos bien estructurados, lograrás cumplir con la normativa de manera eficaz y mejorarás la cultura laboral de tu empresa.
Una vez constituida la comisión, el siguiente paso es desarrollar una normativa interna clara que prohíba cualquier tipo de acoso, tanto moral como sexual. Estas medidas deben incluir reglas de comportamiento y sanciones para quienes cometan acoso, así como para quienes lo encubran.
Es fundamental crear canales de denuncia accesibles, confidenciales y efectivos. Estos pueden ser tanto físicos (buzón de sugerencias) como digitales (correo electrónico, formularios web). Además, es importante garantizar que las denuncias serán tratadas de manera imparcial y rápida.
Una vez que el protocolo está listo, es crucial comunicarlo a todos los empleados de la empresa. Organiza sesiones informativas, distribuye documentos por email y asegúrate de que todos los trabajadores sepan cómo y dónde denunciar si son víctimas o testigos de acoso.
En nuestra consultoría, te ofrecemos un servicio integral para implantar el protocolo de acoso laboral en tu empresa. Nos encargamos de:
Escríbenos o llámanos y te ayudaremos a cumplir con la normativa en menos tiempo del que imaginas. ¡Solicita tu presupuesto sin compromiso!
Aunque no es obligatorio impartir cursos a los empleados, sí lo es informarles, y es muy recomendado dar formación para poder seguir el protocolo correctamente y mantener bien alineados a todos los trabajadores.
Ofrecemos cursos de formación especializados que no solo cumplen con la normativa, sino que también mejoran la concienciación dentro de tu equipo. Esto asegura que todos estén alineados con las políticas de la empresa y sepan cómo actuar ante posibles casos.
Todas las empresas en España, independientemente de su tamaño, están obligadas a implementar un protocolo de acoso laboral. Desde pymes hasta grandes corporaciones, nadie está exento de esta normativa.
Las sanciones varían en función de la gravedad de la infracción, pero las más comunes van desde multas leves (600 euros) hasta multas muy graves (187.515 euros).
Un protocolo de acoso laboral bien implementado no solo protege a la empresa de posibles sanciones, sino que también fomenta un ambiente de trabajo seguro, en el que los empleados pueden desempeñar sus funciones sin temor a sufrir hostigamiento o represalias.